Probablemente usaron pintura líquida en algún momento, ya sea para pintar una habitación, piezas decorativas, mobiliarios o vehículos. Se trata de la pintura más popular y la más utilizada para aplicaciones menores. Es utilizada también en entornos industriales; sin embargo, no es muy efectiva para muchas empresas. Las últimas prefieren la pintura en polvo o electrostática, que se aplica con una pistola para pintar, ya que ofrece mejores acabados, mayor resistencia, entre otras bondades.
La pintura en polvo satisface los requerimientos industriales
Es importante destacar que la pintura electrostática es un método muy ventajoso para los distintos sectores y presenta características físicas superiores en comparación con las de la pintura líquida convencional, lo que provee a las industrias de ventajas que garantizan la calidad, durabilidad y rendimiento de las piezas que recubren.
La pintura líquida se compone de pigmentos mezclados con otros componentes, como solventes volátiles, aditivos y ligantes para que actúe adecuadamente y se mantengan los pigmentos en su sitio con sus secantes y estabilizantes. Es un recubrimiento orgánico que se aplica de forma sencilla, aunque esto no significa que sea más económica y efectiva, ya que genera problemas superficiales en algunas piezas. Las ampollas y arrugas son dos defectos típicos en la aplicación de pintura líquida y son más difíciles de controlar.
Para aplicar la pintura en polvo, se necesitan instrumentos, como la pistola para pintar, además sus procedimientos requieren especialización y mayores costos, no obstante es más conveniente a largo plazo, ya que no genera burbujas, escurrimientos ni grumos. Pueden aparecer problemas superficiales, pero son más fáciles de controlar. El alto costo inicial de los equipos electrostáticos se amortiza rápidamente, ya que aumentan la producción, requieren poco y tienen una gran vida útil.
Es difícil que las superficies revestidas con pintura líquida tengan un acabado uniforme. Se deterioran también de forma rápida, por tal motivo, se requieren frecuentes inversiones de dinero para darles mantenimiento a las piezas. Una superficie metálica menos acabada es propensa a corroerse y lucir mal, por lo que industrias, como la automotriz, construcción, fabricantes de racks, equipos eléctricos, entre otros, prefieren los equipos de pintura electrostática.
Otra razón por la que muchas empresas usan pintura electrostática y no líquida ya sea en cortina o baños, es su capacidad de conservarse por muchos años. También ofrece aspectos más compactos y acabados finos y cuidados. Recubre cada espacio de las piezas, incluso aquellas con geometrías complejas y provee de mayor calidad. El polvo es muy económico e implica ahorros notables, ya que, al aplicarse en las cabinas para pintura, no se desperdicia.
Su aplicación es más segura, ya que, a diferencia de la pintura líquida, no contiene solventes. Es una gran ventaja para los aplicadores, ya que no pone en riesgo su salud. Además, la pintura en polvo no es altamente contaminante ni inflamable. Como mencionamos, las pinturas líquidas son mezcladas con solventes, que se volatilizan durante el proceso. Esto implica residuos e impactos negativos para el medio ambiente.
En cambio, la pintura en polvo tiene alta adherencia a las superficies, lo que minimiza las pérdidas de material. También pueden reutilizarse los residuos que no se adhirieron, debido a que las cabinas integran excelentes sistemas de recolección. No posee componentes tóxicas ni desprende sustancias peligrosas para el medio ambiente, por lo que es considerada una de las pinturas más ecológicas, algo importante para muchas industrias que desean volverse sostenibles.
Muestra también mucha resistencia ante el entorno y las piezas revestidas pueden usarse en exteriores. Esto es posible debido a las propiedades de los pigmentos, que resisten ante factores como lluvia, humedad, nieve, vientos fuertes, calor, radiación ultravioleta, entre otros. La pintura líquida, en cambio, posee muy poca resistencia y se deteriora rápidamente si se expone a los factores mencionados.
El proceso de aplicación de la pintura en polvo también es más ventajoso. Las piezas se cuelgan y conectan a tierra dentro de cabinas mientras se aplica el recubrimiento cuando se recibe previamente la carga electrostática. Eso implica menos marcas extrañas y poco estéticas, lo que puede ocurrir mientras se aplica la pintura líquida mediante inmersión o cortina. Posteriormente, se introducen en un horno de curado, ya sea infrarrojo, ultravioleta o de convección para que la pintura sea sellada y se obtenga el resultado esperado.
Adquieran equipos de calidad para pintura en polvo
En definitiva, la pintura en polvo es más conveniente para las industrias por sus características físicas, usos, impactos ambientales, resistencia a factores meteorológicos, entre otros aspectos. Además, puede usarse para recubrir una mayor variedad de superficies y se ofrecen en muchos colores. Si desean equipos para la aplicación de pintura electrostática, como la pistola para pintar, contacten a los expertos de Powdertronic. Marquen al (55) 5239 4775 o envíen un mensaje de correo electrónico a la dirección ventas@powdertronic.com.