El deshidratado de frutas y verduras es crucial en la industria alimentaria, ya que permite eliminar el agua contenida en estos productos, facilitando así su manejo y conservación. Cuando se trata de manejar lotes de varias toneladas, resulta de mucha utilidad usar un horno de secado industrial, ya que optimiza y facilita el proceso, asimismo, asegura la calidad de los alimentos. No obstante, es importante hacer un buen dimensionamiento para evitar pérdidas de eficiencia o falta de productividad. Asimismo, adquirir un ejemplar con un proveedor confiable y con amplia experiencia, como Powdertronic.
El papel de los hornos en el secado de frutas y verduras
Muchos productos actualmente integran frutas y verduras deshidratadas para complementar su valor nutrimental. Se usan tanto en sopas instantáneas, cereales, polvo de verduras, snacks y chips, barras energéticas, productos horneados, entre otros. Esto ha sido gracias a la implementación del horno industrial, que permite deshidratar grandes cantidades de alimento por metro cuadrado y, de esta manera, garantizar su conservación al eliminar el contenido de agua que facilita la proliferación de microorganismos descomponedores, ya sea bacterias, mohos o levaduras.
Los hornos igual permiten que la elaboración de muchos productos secos sea rentable y con pérdidas mucho menores en comparación con otros productos en los que se busca preservar la frescura, evitando así incumplimientos en las normas de inocuidad por problemas de conservación. Igualmente, evitan la necesidad de incluir aditivos conservadores, posibilitando así la generación de etiquetados limpios, que son cada vez más demandados por los consumidores para el beneficio de su salud.
Al eliminarse la humedad de frutas y verduras, disminuye considerablemente su peso, permitiendo así producciones en grandes cantidades y facilitando su manejo, además, si bien esto conlleva pérdidas en nutrientes (principalmente los que son sensibles al calor, como la vitamina C, ayuda también a la concentración de ciertos nutrientes (como fibra dietética, vitamina B, azúcares y carbohidratos, antioxidantes, minerales, entre otros), algo crucial para dotar de estabilidad nutricional a los productos.
Estos son los beneficios que aporta un horno de secado a los alimentos, pero la inclusión de esta tecnología en procesos industriales tras un buen dimensionamiento es crucial por las siguientes razones:
Deshidratado eficiente
Los hornos utilizan tecnologías como las integradas en los diferentes tipos de hornos para pintura electrostática (por ejemplo, los de convección y radiación), aunque con ligeras variaciones, por ejemplo, la integración de un extractor de humedad en su diseño para retirar el vapor generado por la deshidratación.
Tales tecnologías, permiten que el proceso sea eficiente en cuanto consumo, aunque esto igual depende de un buen dimensionamiento, asimismo, que sea más rápido que los métodos tradicionales, aumentando así la producción. Esto es crucial para satisfacer las demandas del mercado y mantener una producción constante.
Control de temperatura y ambiental
En el deshidratado convencional, por ejemplo, al aire libre, el proceso depende de las variaciones climáticas. Para agilizar el proceso, es necesario controlar la temperatura de forma precisa, lo que es posible con los hornos. Esto igual influye en las características organolépticas del alimento y evita la contaminación por polvo y residuos ambientales, gracias al entorno cerrado que ofrecen. Asimismo, esto es sumamente valioso para empresas alimentarias que operan regiones con condiciones climáticas no favorables.
Proceso uniforme
El horno de convección o de radiación permite que el calor se distribuya de manera uniforme en todas las frutas y verduras, permitiendo así que reciban el mismo tratamiento y evitando inconsistencias en el producto final, así como afectaciones en su apariencia, textura y sabor.
Dimensionamiento del horno
El horno de secado industrial tiene que ser del tamaño correcto, lo que dependerá de la forma de corte y del producto. En Powdertronic consideramos los siguientes criterios para hacer un buen dimensionamiento, lo que ha resultado en experiencias satisfactorias por parte de nuestros clientes:
- Para deshidratado de moras con un diámetro entre seis y doce milímetros y para rebanadas delgadas con un diámetro entre cuatro y cinco milímetros, se recomienda un horno que maneje densidades entre tres y cinco kilos por metro cuadrado.
- Para rebanadas muy delgadas con un diámetro entre 0.5 y dos milímetros, asimismo, para flores, moras y tés con un diámetro menor que cinco milímetros, se recomienda un horno que maneje una densidad de uno o dos kilos por metro cuadrado.
- Para materias primas rebanadas con un diámetro entre seis y siete milímetros y cuartos de fruta de aproximadamente 40 y 50 milímetros, conviene un horno que maneje una densidad de seis a ocho kilos por metro cuadrado.
- Para deshidratar las rebanadas gruesas con un diámetro entre diez y 15 milímetros, así como cuartos o tercios de fruta entre 60 a 70 milímetros, se sugiere un horno que maneje densidades de ocho a diez kilogramos por metro cuadrado.
- Para deshidratado de frutas exprimidas o mitades de frutas o frutas completas con un diámetro de 40 a 60 milímetros conviene un horno que maneje densidades de diez a doce kilos por metro cuadrado.
Si bien somos conocidos por ofrecer hornos de convección para uso industrial en aplicaciones de pintura, así como infrarrojos y ultravioletas, igual tenemos una opción para el secado de frutas y verduras. Manejamos precios competitivos y productos de la más alta calidad. Contáctenos al (55) 5239 4775 o al (55) 5358 9132.
