Los quemadores son elementos indispensables en los hornos de convección para el proceso de curado. Provocan una flama con el uso de combustible sólido o líquido que pone en marcha el proceso de combustión. Utilizan aire, además de combustible, y ambos acceden de manera separada para que en su interior se regulen las cantidades adecuadas y se combinen a la perfección para iniciar el proceso.
Su uso en industrias es útil para otras aplicaciones, aunque se han acoplado a la perfección en el curado de revestimientos de pintura en polvo y son comunes debido a que favorecen el rendimiento del combustible. Los fabricantes las diseñan bajo altos estándares y destacan por la durabilidad de sus materiales y su largo periodo de vida útil bajo mantenimiento regular. No obstante, suelen ocurrir problemas durante su uso que pueden entorpecer el proceso de curado o causar paros totales. Algunos son comunes y pueden resolverlos con los conocimientos debidos.
Importancia de los quemadores en el proceso de curado
El proceso de curado es una fase crucial para las empresas que dependen de la pintura electrostática, ya que determina el desarrollo óptimo de las propiedades funcionales y visuales del revestimiento. Para asegurarlo utilizan quemadores industriales, los cuales se han vuelto indispensables en la industria. Su uso es útil para otras aplicaciones, sin embargo, la más común es la expulsión de aire y fuego en el horno industrial.
La función de los hornos de convección construidos con quemadores es proporcionar a los productos que fueron previamente recubiertos con pintura electrostática el acabado final. La pintura es calentada mediante transferencia de calor convectiva. En este proceso, las cargas energéticas moleculares del fluido presentarán variaciones de acuerdo con la temperatura. Durante el proceso de calentamiento del revestimiento, se llega a una temperatura de curado, que es distinta en cada caso y depende del tipo de recubrimiento que se use.
Posteriormente el producto es retirado con su acabado final. Los quemadores son los equipos que inyectan aire caliente en los hornos, y que se ubican en las cámaras de combustión. La función de las últimas es combinar el aire caliente procedente de los quemadores, el aire ambiental y el que es recirculado del horno.
Problemas comunes y sus soluciones
La mejor manera de evitar errores y aprovechar los beneficios del horno de convección para curado de pintura en polvo es darle mantenimiento a los quemadores. Aunque esto no asegura que los inconvenientes se presentes. A continuación, comentaremos algunos problemas comunes y sus posibles soluciones. Recuerden que lo recomendable es siempre contar con la asesoría de un técnico especialista.
Flamas distorsionadas
Si detectan este problema verifiquen que el block de combustión no tenga daños y que cada quemador tenga los valores de presión correctos. Si hay pérdida de presión del aire es probable que los filtros de aire estén obstruidos. Las distorsiones pueden deberse a fugas, comunes cuando no hay suficiente presión hacia el quemador. Verifiquen que las presiones de gas sean adecuadas y que el filtro de gas se encuentre limpio para que no haya caídas en la presión y se altere el flujo.
Revisen los diafragmas reguladores que con el tiempo se desgastan. Ajusten correctamente la válvula de control de aire y corroboren que las líneas de impulso del regulador proporcional no tengan fugas o bloqueos.
Ineficiencia en la quema de combustibles
Revisen los flujos y presiones de gas y aire que recomiendan los boletines, además, las boquillas o tubos de aire del quemador para los hornos de convección. Si encuentran este problema puede que el estabilizado de la flama o block del quemador esté dañado.
Productos de mala calidad
Revisen que la combinación de gas y aire en la combustión sea adecuada. Muchos piensan que siempre en estequiométrica, sin embargo, en ciertos casos puede ser reductora u oxidante. Los malos acabados pueden darse por infiltraciones de aire causadas por una presión interna desajustada o daños en el aislamiento. Un control deficiente de la temperatura, o termopares con falso contacto en cable o dañados también son causantes. Realicen ajustes de PID en el control de temperatura.
Aislamiento dañado
Las llamas pueden tocar el aislamiento y causar daños cuando está desajustada o es más larga de lo recomendado. Ajusten adecuadamente la relación entre gas y aire y verifiquen las condiciones de la boquilla, además, que el block refractario esté bien sellado y no presente fugas, que pueden dañar la carcasa del horno.
Quemadores que se apagan o no encienden
Si ocurre, ajusten la relación entre combustible y aire y revisen que se encuentre en el rango de Turn/Down del quemador. También que no haya daños en los tubos, block y boquilla y que la señal de detector de flama esté en los rangos de diseño.
Si no encienden ajusten el fuego del quemador en bajo, calibren el piloto o bujía y revisen si hay una buena chispa. Verifiquen que las válvulas no estén cerradas, no haya daños en el quemador por componentes deteriorados y el detector de flama opere correctamente.
Es importante que el manejo del quemador sea seguro. Para garantizarlo revisen permisivos de seguridad, ajusten las válvulas de alivio dentro del rango adecuado para que operen antes de que un incremento de presión cause daños en los equipos. Revisen que el detector de flama opere bien y que las válvulas de seguridad sean herméticas y se cierren correctamente. Realicen ajustes en los actuadores y herrajes.
Ajuste de los herrajes y actuadores con válvulas de control, verifiquen las condiciones de los arrancadores de los motores y que estén protegidos por alto amperaje y el estado del cable de ignición. Asegúrense de revisar las normativas relacionadas con el uso de hornos industriales, por ejemplo, la NFPA-86.
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